Las ayudas técnicas son instrumentos o equipos utilizados para mantener la autonomía personal de los pacientes con artritis y adultos mayores.
Se conoce como ayudas técnicas a aquellos productos, instrumentos, equipos o sistemas técnicos utilizados por una persona con discapacidad, fabricados especialmente o disponibles en el mercado para prevenir, compensar, disminuir o neutralizar deficiencias, discapacidades o minusvalías causadas por la edad y enfermedades como la artritis.
El uso de las ayudas técnicas adecuadas permite que los pacientes con artritis o adultos mayores con movilidad reducida aumenten la capacidad funcional para realizar las tareas cotidianas e incrementen su nivel de independencia y autonomía.
Algunos ejemplos son los cubiertos adaptados, peines, cortaúñas o esponjas de mango alargado, asientos de bañera o regaderas, alzas de asiento para inodoros, abotonadores, ganchos para vestirse, calza calcetines.
En resumen, las ayudas técnicas para las actividades de la vida diaria permiten al paciente con artritis y a los adultos mayores ser independientes y aprovechar sus capacidades. Son herramientas creadas para conseguir no solo un ahorro de energía, sino también la posibilidad de realizar acciones que de otra forma serían imposibles o difíciles de realizar. La falta de información y conocimiento sobre la existencia de estos productos impide su adquisición y, por lo tanto, el beneficio que supone disponer de ellos.
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