El principal objetivo de descansar es promover el equilibrio de la mente, el cuerpo y el espíritu para incrementar la sensación de energía, la creatividad, la productividad, la claridad mental y, en general, la salud. 

Te recomendamos varias modalidades de descanso

1. Descanso pasivo: Abarca actividades como dormir y tomar siestas ya que

        el sueño interviene en la memoria y la regulación emocional, tomar siestas cortas durante la tarde mejora el rendimiento cognitivo.

2. Descanso activo: Son otras actividades que contribuyen con la relajación del cuerpo como practicar yoga, taichí y reiki entre otros.

        Estos tipos de descanso  disminuyen el estrés físico y mental que sufre el cuerpo en el día a día. 

       Ayudan a regular la frecuencia cardíaca y respiratoria, estimulan la circulación, reducen el dolor crónico, mejoran la calidad de sueño y calman la fatiga         que provoca la fibromialgia.

3. Descanso mental: Consiste en desconectar la mente de todo lo que tiene que ver con las obligaciones diarias, tomar un paseo al aire libre, buscar un espacio silencioso, disfrutar una sesión de aromaterapia o cualquier actividad que permita tomar una pausa para dejar de pensar.

      Para que el cuerpo aproveche este descanso es necesario desconectarse por completo de los dispositivos electrónicos para prevenir y mitigar los                  efectos del tecnoestrés.

4. Descanso sensorial: Se recomienda cerrar los ojos por unos minutos durante las pausas activas, practicar respiraciones profundas y la meditación.
5. Descanso emocional: Para lo cual debes pasar tiempo a solas y priorizar tus necesidades por encima de las de los demás
6. Descanso social: Debes dejar de lado aquellas obligaciones sociales con las que no te sientes bien o que no te aporten nada a tu bienestar.

Cuando descansamos, el cuerpo se recupera, mejora la memoria, se fortalece el sistema inmunológico, baja la presión sanguínea, se reduce la inflamación en el cuerpo, la concentración y capacidad mental mejora y se recupera la energía.

Un buen descanso permite estar más activos, más concentrados, con más energías para disfrutar completamente del día a día, favoreciendo el desarrollo personal, mejorando las relaciones interpersonales y contribuyendo a la felicidad.