• Duerme bien: Durante el sueño nuestro organismo lleva a cabo funciones fisiológicas imprescindibles para el equilibrio psíquico y físico, lo ideal es dormir entre 7 y 8 horas diarias, tomar una pequeña siesta te ayudará a mantenerte con energía.
• Desconecta y medita: Escápate a la naturaleza, un rato de desconexión en el mar te llenará de energía positiva y medita disfrutando el paisaje, debes tomarte todo el tiempo que necesites.
• Realiza respiraciones profundas: De esta manera el cuerpo se relaja, exhalando el estrés inhalando energía positiva.
• Practica ejercicios: Aunque parezca una contradicción, la mejor manera para disminuir la fatiga y el cansancio es hacer algo de ejercicio lo cual mejora tu condición física y favorece la sensación de bienestar gracias a la liberación de endorfinas.
• Mantente hidratado: Cuando tu cuerpo no tiene suficiente agua, se debilita, tanto física como mentalmente por lo que deberás beber agua durante todo el día, pero sobre todo en las horas de mayor calor.
• Ten una alimentación saludable: El secreto es seguir una dieta equilibrada en la que no falten las frutas, verduras, frutos secos, carbohidratos y proteínas. Es recomendable evitar alimentos fritos, los dulces, el alcohol, los refrescos y la comida rica en grasas no saludables, como la comida rápida.

• Desayuna bien: El desayuno es la comida más importante del día, un desayuno completo ayuda a conseguir los aportes nutricionales óptimos de la energía que tu cuerpo necesita para todo el día.

• Intenta ser feliz: Debes tener esperanza, pasión, diversión y sentirte realizado, busca tu felicidad cada día.
Sigue estas recomendaciones para disfrutar de un estilo de vida saludable, controlar tu enfermedad y contribuir a tu bienestar.